En las últimas semanas un programa periodístico realizaba un informe sobre este tema. Del mismo participaban madres, psicólogas de diferentes concepciones teóricas y médicos pediatras.
En éste, como en otros informes periodísticos, hay padres y profesionales que defienden los beneficios de que niños mayores continúen siendo amamantados y duerman con sus padres y otros profesionales consideran que esto genera consecuencias negativas en la salud mental y en el desarrollo de los niños.
Se intenta definir y abordar la CRIANZA CON APEGO y sólo se limitan a hacer referencia a la lactancia prolongada y el colecho.
Más allá que desde este espacio compartimos los beneficios que ambas cuestiones tienen en el desarrollo emocional de los niños consideramos que la CRIANZA CON APEGO y la CRIANZA RESPETUOSA van mucho más allá de la lactancia prolongada y el colecho. Estas son, en algunas ocasiones, consecuencias y no causa de una forma de crianza.
La crianza con apego consiste fundamentalmente en el respeto absoluto por las necesidades emocionales del bebé. Reconocer, atender y ser empáticos con lo que le sucede niño.
Para ello es fundamental priorizar las necesidades del bebé y despojarse de la visión adultocentrista que esta sociedad nos impone. Seguramente escucharemos: "no lo tengas mucho a upa porque se va a malcriar", "te va a tomar el tiempo", "es demasiado grande para que siga tomando teta", "ya debería dormir toda la noche", "dejalo llorar que no le va a pasar nada". Estas frases lo único que logran es poner en veredas opuestas a padres e hijos. Nadie va a querer consentir a otro si pensamos que nos esta manipulando, esto genera una distancia emocional que impide que comprendamos y empaticemos con el bebé.
En la crianza con apego es necesario ubicarnos en la misma vereda, implicarnos emocionalmente con sus necesidades, comprender las diferentes etapas y los tiempos en su desarrollo. Comprender que los bebés no nos toman el tiempo, no nos manipulan, sino que NOS NECESITAN.
Como consecuencia de esto, muchos bebés continúan siendo amamantados y duermen con sus padres, pero esto no es la causa sino la consecuencia. También es posible una crianza con apego con bebés alimentados con leche artificial o una lactancia materna con una crianza sin apego. Lo mismo es aplicable al colecho.
La Attachment Parenting International (API), partidarios de la Crianza con Apego del Dr. Sears, intentan fomentar un vínculo seguro con los hijos mediante ocho principios que se identifican como metas a conseguir por los padres. Estos ocho principios son:
1. Preparación para el embarazo, el nacimiento y la labor como padres.
2. Alimentación con amor y respeto.
3. Responder con sensibilidad.
4. Utilizar la crianza de apego.
5. Incluir la crianza también durante las noches.
6. Proporcionar el cuidado cariñoso constante.
7. Practicar la disciplina positiva.
8. Esforzarse para un equilibrio en la vida personal y familiar.
Lo fundamental en la crianza con apego es que prime el respeto y el amor, es brindarles a los niños un crecimiento en armonía y acompañarlos en forma cariñosa en todo momento.